Estatal
Nuevos avances en investigación sobre jóvenes asesinados

La investigación sobre la desaparición y asesinato de nueve jóvenes de Tlaxcala en Oaxaca apunta a que fueron entregados al crimen organizado tras el robo de 500 mil pesos. La principal línea de indagación de las autoridades se centra en la posible participación de elementos municipales de Huatulco.
¿Cómo fue el hallazgo?
El 1 de marzo, en San José Mihuatlán, Puebla, cerca de la frontera con Oaxaca, autoridades encontraro un vehículo con las víctimas. Al día siguiente, finalizó el levantamiento de los cuerpos. Se confirmó que al menos seis de las víctimas pertenecían a un grupo de jóvenes tlaxcaltecas que habían viajado a Oaxaca por trabajo.
Los reportes indican que José Alfredo Lavariega Canseco, alias “La Jocha”, un empresario y político de la región, contrató al grupo de jóvenes. El propio Lavariega Canseco resultó localizado el mismo 1 de marzo en Huatulco con las manos cercenadas, lo que refuerza la hipótesis de un ajuste de cuentas.
¿Cómo se realizó la indagatoria?
Según las investigaciones, el empresario habría contratado a los jóvenes en febrero para cometer asaltos a bancos y turistas. Luego, los alojó en su hotel de Huatulco, donde presuntamente seleccionaban a sus víctimas. Sin embargo, se presume que los jóvenes robaron 500 mil pesos a un integrante del crimen organizado, lo que desató una persecución en la que participaron tanto sicarios como elementos policiacos.
Uno de los testimonios clave en la investigación es el de una sobreviviente del grupo de Tlaxcala, quien declaró que a finales de febrero, policías municipales irrumpieron en el hotel y entregaron a los jóvenes a una célula criminal.
Finalmente, la Fiscalía de Oaxaca informó al Gabinete de Seguridad Nacional que investiga la posible implicación de agentes de Santa María Huatulco y San Pedro Pochutla en estos hechos. Mientras tanto, las familias de las víctimas exigen justicia y el esclarecimiento de este caso, que ha conmocionado a la opinión pública.